SALUD MENTAL
La salud mental es una gran olvidada y depende en gran medida de la financiación pública. Los médicos que deben velar por ella están saturados y no cuentan con tiempo y recursos suficientes para atender a los pacientes en tiempo y forma. Y sabemos que una intervención a tiempo puede ser la diferencia para muchos. Pero no sólo la financiación es un problema, hay otros:
- falta de médicos especialistas en la salud pública
tiempo de atención al paciente demasiado cortos
- listas de espera interminables
¿Qué podemos hacer?
Según la Organización Mundial de la Salud, una de cada ocho personas en el mundo padece un trastorno mental. Aunque existen opciones eficaces de prevención y tratamiento, la mayoría de las personas carecen de acceso a una atención eficaz
Necesitamos diputados de confianza, que se deban a sus votantes primero, si queremos que mejore la atención a la salud mental en nuestro sistema de salud público.
Por un cambio en el sistema
Necesitamos políticos de confianza, también para ayudar en la salud mental


